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jueves, 24 de marzo de 2016

"Tomando el pan ,dio gracias, lo partió, y se lo dio."


 Jueves Santo 



"No me han elegido ustedes a mi, sino que yo los elegí a ustedes, y los he destinado para que den frutos, y vuestro fruto  permanezca para que cuanto pidieran al Padre en mi nombre El se los dará".
(JN 15,16)




Hoy Se celebra

 La Última Cena.
 El Lavatorio de los pies.

 La institución de la Eucaristía y del Sacerdocio.















jueves, 7 de agosto de 2014

DOMINGO 10 DE AGOSTO XIX DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

MISSALE ROMANUM
COLOR VERDE
AÑO A


RITOS INICIALES
RITUS INITIALES
RITI DI INTRODUZIONE

INTROITUS
ANTÍFONA DE ENTRADA Sal. 73,20.19.22.23


Acuérdate, Señor, de tu alianza, y no olvides para siempre a tus pobres. Levántate, Señor, defiende tu causa y no desoigas el clamor de los que te invocan.

Réspice, Dómine, in testaméntum tuum, et ánimas páuperum tuórum ne derelínquas in finem. Exsúrge, Dómine, et iúdica causam tuam, et ne obliviscáris voces quæréntium te.

Sii fedele, Signore, alla tua alleanza, non dimenticare mai la vita dei tuoi poveri. Sorgi, Signore, difendi la tua causa, non dimenticare le suppliche di coloro che ti invocano.
 

Reunido el pueblo, el sacerdote con los ministros va al altar, mientras se entona el can­to de entrada.
Cu ando llega al altar, el sacerdote con los ministros hace la debida reverencia, besa el altar y, si se juzga oportuno, lo inciensa. Después se dirige con los ministros a la sede. Terminado el canto de entrada, el sacerdote y los fieles, de pie, se santiguan, mientras el sacerdote dice:
En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.
In nomine Patris et Filii et Spiritus Sancti.
Amen.
Nel nome del Padre del Figlio e dello Spirito Santo.
Amen.

El sacerdote, extendiendo las manos, saluda al pueblo con una de las fórmulas siguientes:
SALUDO
SALUTATIO
SALUTO DEL CELEBRANTE
El Señor esté con vosotros
Dominus vobiscum.
Il Signore sia con voi.

Respuesta
Y con tu espíritu.
Et cum spiritu tuo.
E con il tuo spirito.

ACTO PENITENCIAL
Actus Pænitentialis
ATTO PENITENZIALE

Kyrie, eleison.
Kyrie, eleison.

Christe, eleison.
Christe, eleison.

Kyrie, eleison.
Kyrie, eleison.

Señor, ten piedad.
Señor, ten piedad.

Cristo, ten piedad.
Cristo, ten piedad.

Señor, ten piedad.
Señor, ten piedad

Signore, pietà.
Signore, pietà.

Cristo, pietà.
Cristo, pietà.

Signore, pietà.
Signore, pietà.

GLORIA
Acabado el himno, el sacerdote, con las manos juntas dice:
Oremos.
Preghiamo
Y todos junto con el sacerdote rezan en silencio durante unos instantes. Luego el sacerdote con las manos extendidas pronuncia la oración colecta. Cuando ésta finaliza el pueblo aclama: Amen

ORACIÓN COLECTA
ORATIO COLLECTA
COLLETTA
S: Oremus


Dios todopoderoso y eterno, a quien podemos llamar Padre, confirma en nuestros corazones el espíritu de los hijos adoptivos para que merezcamos obtener la herencia prometida.
Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios, por los siglos de los siglos.

Omnípotens sempitérne Deus, quem, docénte Spíritu Sancto, patérno nómine invocáre præsúmimus, pérfice in córdibus nostris spíritum adoptiónis filiórum, ut promíssam hereditátem íngredi mereámur. Per Dóminum.


Dio onnipotente ed eterno, che ci dai il privilegio di chiamarti Padre, fa'crescere in noi lo spirito di figli adottivi, perché possiamo entrare nell'eredità che ci hai promesso. Per il nostro Signore...


viernes, 9 de mayo de 2014

A través de los signos, el misterio se abre de alguna manera a los ojos del creyente.




San Juan Pablo II
Jesús se presentó a sí mismo como la «luz del mundo» (Jn 8,12), y esta característica resulta evidente en aquellos momentos de su vida, como la Transfiguración y la Resurrección, en los que resplandece claramente su gloria divina. En la Eucaristía, sin embargo, la gloria de Cristo está velada. El Sacramento eucarístico es un «mysterium fidei» por excelencia. Pero, precisamente a través del misterio de su ocultamiento total, Cristo se convierte en misterio de luz, gracias al cual se introduce al creyente en las profundidades de la vida divina. En una feliz intuición, el célebre icono de la Trinidad de Rublëv pone la Eucaristía de manera significativa en el centro de la vida trinitaria.



La Eucaristía es luz, ante todo, porque en cada Misa la liturgia de la Palabra de Dios precede a la liturgia eucarística, en la unidad de las dos «mesas», la de la Palabra y la del Pan. Esta continuidad aparece en el discurso eucarístico del Evangelio de Juan, donde el anuncio de Jesús pasa de la presentación fundamental de su misterio a la declaración de la dimensión propiamente eucarística: «Mi carne es verdadera comida y mi sangre es verdadera bebida» (Jn 6,55). Sabemos que esto fue lo que puso en crisis a gran parte de los oyentes, llevando a Pedro a hacerse portavoz de la fe de los otros Apóstoles y de la Iglesia de todos los tiempos: «Señor, ¿a quién vamos a acudir? Tú tienes palabras de vida eterna» (Jn 6,68). En la narración de los discípulos de Emaús Cristo mismo interviene para enseñar, «comenzando por Moisés y siguiendo por los profetas», cómo «toda la Escritura» lleva al misterio de su persona (cf. Lc 24,27). Sus palabras hacen «arder» los corazones de los discípulos, los sacan de la oscuridad de la tristeza y desesperación y suscitan en ellos el deseo de permanecer con Él: «Quédate con nosotros, Señor» (cf. Lc24,29).


 Es significativo que los dos discípulos de Emaús, oportunamente preparados por las palabras del Señor, lo reconocieran mientras estaban a la mesa en el gesto sencillo de la «fracción del pan». Una vez que las mentes están iluminadas y los corazones enfervorizados, los signos «hablan». La Eucaristía se desarrolla por entero en el contexto dinámico de signos que llevan consigo un mensaje denso y luminoso. A través de los signos, el misterio se abre de alguna manera a los ojos del creyente.

CARTA APOSTÓLICA MANE NOBISCUM DOMINE. EXTRACTOS

jueves, 8 de mayo de 2014

El fiel cristiano recibe la Eucaristía



Es tradición y norma de la Iglesia que el fiel cristiano recibe la Eucaristía, que es comunión en el Cuerpo de Cristo y en la Iglesia; por esta razón no se ha de tomar el pan consagrado directamente de la patena o de un cesto, como se haría con el pan ordinario o con pan simplemente bendito.
(Congregación para el Culto divino año 1985)


El padre Rafael Fernandez en su libro  los símbolos en la Eucaristía nos dice: El gesto simbólico requiere recibir, antes que tomar. Este gesto litúrgico expresa más nítidamente que es Cristo quien nos da el Pan, por medio del sacerdote, signo visible suyo.


viernes, 21 de marzo de 2014

Entonces Pedro le dijo a Jesús: "Señor, ¡qué bueno sería quedarnos aquí!

SANTUARIO CENÁCULO DE BELLAVISTA.
PRESIDIO LA  MISA EL PADRE  DARIO BALBONTIN SPOERER
SEGUNDO DOMINGO DE CUARESMA










Tu Santuario irradia sobre nuestro tiempo 
los resplandores y la gloria del Sol del Tabor.

Donde se manifiesta con claridad el Sol de Cristo
y, como en el Tabor,
traza un recorrido victorioso,
allí es bueno estarse,
allí se está como en el paraíso,
pues el espíritu Santo  ha establecido su morada.

Vaso entregado al Espíritu de Santidad 
envuelta enteramente
por el Sol resplandeciente del Tabor,
actúas en Schoenstatt
bondadosa Medianera,

guiándonos hacia el Espíritu Santo.
(Del libro hacia el Padre. Siervo de Dios P. José Kentenich nro 196-198)








Por eso, tengo que estar con mi corazón abierto bajo la cruz… Tengo que hacerme realmente sensible a los sacrificios de Cristo y a los tuyos, para hacerme sensible a la gracia, a sus impulsos e insinuaciones. Madrecita querida, dame delicadeza de oído, particularmente ante lo me llega por sufrimiento y peticiones de sacrificios que me haga mi Padre Celestial.

(Diario V.361   1.7.60 Siervo de Dios Mario Hiriart)





RITOS INICIALES
ENTRADA





LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA-SALMO RESPONSORIAL-SEGUNDA LECTURA














LECTURA DEL EVANGELIO




Del santo Evangelio según san Mateo: 17, 1-9

En aquel tiempo, Jesús tomó consigo a Pedro, a Santiago y a Juan, el hermano de éste, y los hizo subir a solas con Él a un monte elevado. Ahí se transfiguró en su presencia: su rostro se puso resplandeciente como el sol y sus vestiduras se volvieron blancas como la nieve. De pronto aparecieron ante ellos Moisés y Elías, conversando con Jesús. Entonces Pedro le dijo a Jesús: "Señor, ¡qué bueno sería quedarnos aquí! Si quieres, haremos aquí tres chozas, una para ti, otra para Moisés y otra para Elías".
Cuando aún estaba hablando, una nube luminosa los cubrió y de ella salió una voz que decía: "Éste es mi Hijo muy amado, en quien tengo puestas mis complacencias; escúchenlo". Al oír esto, los discípulos cayeron rostro en tierra, llenos de un gran temor. Jesús se acercó a ellos, los tocó y les dijo: "Levántense y no teman". Alzando entonces los ojos, ya no vieron a nadie más que a Jesús.
Mientras bajaban del monte, Jesús les ordenó: "No le cuenten a nadie lo que han visto, hasta que el Hijo del hombre haya resucitado de entre los muertos"
S: Palabra del Señor .Te alabamos Señor







HOMILÍA







LITURGIA EUCARÍSTICA
PREPARACIÓN DE LOS DONES















ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS





PLEGARIA EUCARÍSTICA
EPÍCLESIS




NARRACIÓN DE LA INSTITUCIÓN Y CONSAGRACIÓN
EL CUERPO








LA SANGRE








ANÁMNESIS-OBLACIÓN-INTERCESIONES









DOXOLOGÍA FINAL






RITO DE COMUNIÓN



COMUNIÓN






















ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN




RITO DE CONCLUSIÓN


BENDICIÓN DEL SACERDOTE




BESO DEL ALTAR POR PARTE DEL SACERDOTE




CAMINO AL SANTUARIO PARA CONSAGRARNOS A LA MATER









REZO DEL ÁNGELUS Y CONSAGRACIÓN A LA MATER
















AÑO JUBILAR EN LOS 100 AÑOS DE LA ALIANZA DE AMOR

1914-2014