jueves, 27 de junio de 2013

SOLEMNIDAD DE SAN PEDRO Y SAN PABLO

29 DE JUNIO
COLOR ROJO
MISA DEL DÍA




RITO DE ENTRADA
Antífona de entrada
Estos son los hombres que mientras estuvieron en la tierra, plantaron la Iglesia con su sangre: bebieron el cáliz del Señor y llegaron a ser amigos de
Dios.

Isti sunt qui, vivéntes in carne, plantavérunt Ecclésiam sánguine suo: cálicem Dómini bibérunt, et amíci Dei facti sunt.

Sono questi i santi apostoli che nella vita terrena
hanno fecondato con il loro sangue la Chiesa:
hanno bevuto il calice del Signore, e sono diventati gli amici di Dio.


Se canta o se dice el Gloria.

Oración colecta
Padre de bondad, que nos llenas de alegría en la celebración litúrgica de san Pedro y san Pablo, concede a tu Iglesia que se mantenga siempre fiel a las enseñanzas de aquellos por quienes comenzó la propagación de la fe.
Te lo pedimos por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios, por los siglos de los siglos.

Deus, qui huius diéi venerándam sanctámque lætítiam in apostolórum Petri et Pauli sollemnitáte tribuísti, da Ecclésiæ tuæ eórum in ómnibus sequi præcéptum, per quos religiónis sumpsit exórdium. Per Dóminum.

O Dio, che allieti la tua Chiesa con la solennità dei santi Pietro e Paolo, fa' che la tua Chiesa segua sempre l'insegnamento degli Apostoli dai quali ha ricevuto il primo annunzio della fede. Per il nostro Signore Gesù Cristo, tuo Figlio, che è Dio, e vive e regna con te...

LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 12, 1-11
En aquellos días, el rey Herodes mandó apresar a algunos miembros de la Iglesia para maltratarlos. Mandó pasar a cuchillo a Santiago, hermano de Juan, y viendo que eso agradaba a los judíos, también hizo apresar a Pedro. Esto sucedió durante los días de la fiesta de los panes Ázimos. Después de apresarlo, lo hizo encarcelar y lo puso bajo la vigilancia de cuatro turnos de guardia, de cuatro soldados cada turno. Su intención era hacerlo comparecer ante el pueblo después de la Pascua. Mientras Pedro estaba en la cárcel, la comunidad no cesaba de orar a Dios por él.
La noche anterior al día en que Herodes iba a hacerlo comparecer ante el pueblo, Pedro estaba durmiendo entre dos soldados, atado con dos cadenas y los centinelas cuidaban la puerta de la prisión. De pronto apareció el ángel del Señor y el calabozo se llenó de luz. El ángel tocó a Pedro en el costado, lo despertó y le dijo: "Levántate pronto". Entonces las cadenas que le sujetaban las manos se le cayeron. El ángel le dijo: "Cíñete la túnica y ponte las sandalias", y Pedro obedeció. Después le dijo: "Ponte el manto y sígueme". Pedro salió detrás de él, sin saber si era verdad o no lo que el ángel hacía, y le parecía más bien que estaba soñando. Pasaron el primero y el segundo puesto de guardia y llegaron a la puerta de hierro que daba a la calle. La puerta se abrió sola delante de ellos. Salieron y caminaron hasta la esquina de la calle y de pronto el ángel desapareció.
Entonces, Pedro se dio cuenta de lo que pasaba y dijo: "Ahora sí estoy seguro de que el Señor envió a su ángel para librarme de las manos de Herodes y de todo cuanto el pueblo judío esperaba que me hicieran". Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.


SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 33 R/. El Señor me libró de todos mis temores.
Bendeciré al Señor a todas horas, no cesará mi boca de alabarlo. Yo me siento orgulloso del Señor, que se alegre su pueblo al escucharlo. 

R/.
Proclamemos la grandeza del Señor y alabemos todos juntos su poder. Cuando acudí al Señor, me hizo caso y me libró de todos mis temores. 

R/.
Confía en el Señor y saltarás de gusto, jamás te sentirás decepcionado, porque el Señor escucha el clamor de los pobres y los libra de todas sus angustias. 

R/.
Junto a aquellos que temen al Señor el ángel del Señor acampa y los protege. Haz la prueba y verás qué bueno es el Señor. Dichoso el hombre que se refugia en Él. 

R/.

SEGUNDA LECTURA
De la segunda carta del apóstol san Pablo a Timoteo: 4, 6-8. 17-18

Querido hermano: Ha llegado para mí la hora del sacrificio y se acerca el momento de mi partida. He luchado bien en el combate, he corrido hasta la meta, he perseverado en la fe. Ahora sólo espero la corona merecida, con la que el Señor, justo juez, me premiará en aquel día, y no solamente a mí, sino a todos aquellos que esperan con amor su glorioso advenimiento.
Cuando todos me abandonaron, el Señor estuvo a mi lado y me dio fuerzas para que, por mi medio, se proclamara claramente el mensaje de salvación y lo oyeran todos los paganos. Y fui librado de las fauces del león. El Señor me seguirá librando de todos los peligros y me llevará sano y salvo a su Reino celestial. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor
.

ACLAMACIÓN (Mt 16, 18) R/. Aleluya, aleluya.
Tú eres Pedro y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia, y los poderes del infierno no prevalecerán sobre ella, dice el Señor. R/.

EVANGELIO
Del santo Evangelio según san Mateo: 16, 13-19


En aquel tiempo, cuando llegó Jesús a la región de Cesarea de Filipo, hizo esta pregunta a sus discípulos: "¿Quién dice la gente que es el Hijo del hombre?". Ellos le respondieron: "Unos dicen que eres Juan el Bautista; otros, que Elías; otros, que Jeremías o alguno de los profetas".
Luego les preguntó: "Y ustedes, ¿quién dicen que soy yo?". Simón Pedro tomó la palabra y le dijo: "Tú eres el Mesías, el Hijo de Dios vivo".
Jesús le dijo entonces: "¡Dichoso tú, Simón, hijo de Juan, porque esto no te lo ha revelado ningún hombre, sino mi Padre, que está en los cielos! Y yo te digo a ti que tú eres Pedro y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia. Los poderes del infierno no prevalecerán sobre ella. Yo te daré las llaves del Reino de los cielos; todo lo que ates en la tierra quedará atado en el cielo, y todo lo que desates en la tierra quedará desatado en el cielo". Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.


LITURGIA EUCARISTICA
Se dice Credo.
Oración sobre las ofrendas
Haz, Señor, que la oración de tus apóstoles acompañe estas ofrendas que te presentamos y gracias a ellas, acrecienta nuestro fervor para celebrar este sacrificio.
Por Jesucristo, nuestro Señor.

Hóstiam, Dómine, quam nómini tuo exhibémus sacrándam, apostólica prosequátur orátio, nosque tibi reddat in sacrifício celebrándo devótos. Per Christum.

O Signore, la preghiera dei santi Apostoli accompagni l'offerta che presentiamo al tuo altare e ci unisca intimamente a te nella celebrazione di questo sacrificio, espressione perfetta della nostra fede. Per Cristo nostro Signore.

Prefacio
LA DOBLE MISIÓN DE PEDRO Y PABLO EN LA IGLESIA
V. El Señor esté con ustedes
R. Y con tu espíritu.
V. Levantemos el corazón.
R. Lo tenemos levantado hacia el Señor.
V. Demos gracias al Señor, nuestro Dios.
R. Es justo y necesario.
Realmente es justo y necesario,
es nuestro deber y salvación
glorificarte siempre Señor, Padre santo,
Dios todopoderoso y eterno.
Tú quieres que hoy los santos Apóstoles Pedro y Pablo
sean causa de nuestra alegría:
Pedro fue el primero en confesar la fe,
Pablo el insigne maestro que la interpretó;
aquél formó la primera Iglesia con el resto de Israel,
éste fue quien la extendió entre los paganos llamados a la fe.
De esta manera, Padre, congregaron por diversos caminos
a la única familia de Cristo,
y a los dos, coronados por el martirio,
hoy los celebra y venera tu pueblo creyente.
Por eso, con los ángeles y los santos
cantamos sin cesar,
el himno de tu gloria:
Santo, Santo, Santo...
Vere dignum et iustum est, æquum et salutáre,
nos tibi semper et ubíque grátias ágere:
Dómine, sancte Pater, omnípotens ætérne Deus.

Quia nos beáti apóstoli Petrus et Paulus
tua dispositióne lætíficant: hic princeps
fídei confiténdæ, ille intellegéndæ clarus assértor;
hic relíquiis Isræl instítuens Ecclésiam primitívam,
ille magíster et doctor géntium vocandárum.
Sic divérso consílio unam Christi famíliam congregántes,
par mundo venerábile, una coróna sociávit.
Et ídeo cum Sanctis et Angelis univérsis te collaudámus,
sine fine dicéntes:

Sanctus, Sanctus, Sanctus Dóminus Deus Sábaoth...

Oración después de la comunión
Después de habernos renovado con este sacramento, te pedimos, Padre, la gracia de vivir en tu Iglesia firmemente arraigados en tu amor, para que por nuestra participación en la fracción del pan y en la enseñanza de los Apóstoles, tengamos un solo corazón y una sola alma.
Por Jesucristo, nuestro Señor.

Da nobis, Dómine, hoc sacraménto reféctis, ita in Ecclésia conversári, ut, perseverántes in fractióne panis Apost olorúmque doctrína, cor unum simus et ánima una, tua caritáte firmáti. Per Christum.

Concedi, Signore, alla tua Chiesa, che hai nutrito alla mensa eucaristica, di perseverare nella frazione del pane e nella dottrina degli Apostoli, per formare nel vincolo della tua carità un cuor solo e un'anima sola. Per Cristo nostro Signore.






No hay comentarios:

Publicar un comentario