El próximo miércoles se inicia la Cuaresma de Fraternidad:
“Dejando de
hacer algo, estás haciendo
mucho”
El 13 de febrero, día en que la Iglesia Católica comienza el tiempo litúrgico de Cuaresma con el Miércoles de Ceniza, se inicia en todo Chile esta iniciativa solidaria con la que se busca potenciar el desarrollo infantil al alcance de todos.
Desde el año 2000, la campaña ha
financiado más de 460 proyectos sociales orientados a distintos grupos
destinatarios. Los últimos tres años, y como una opción de la Iglesia Católica
en Chile, se financiaron 128 iniciativas que continúan ejecutándose a nivel
nacional, cuyos beneficiarios fueron jóvenes en situación de vulnerabilidad.
A partir de este año, los fondos que se recauden apoyarán el trabajo de proyectos para niños y niñas entre 0 y 14 años de distintas zonas del país, con una cobertura superior a 3.300 menores.
Las iniciativas contemplan acciones que benefician la integración social y/o cultural, actividades que promuevan condiciones de participación y acceso a instancias para mejorar la lecto-escritura, todos destinados a niños con necesidades educativas especiales y actividades para el fortalecimiento de vínculos parentales.
Solange Toro (27) tiene una hija de tres años en el jardín infantil “Despertar”, de la Vicaría Zona Sur, y es un ejemplo del gran apoyo que este tipo de iniciativas presta para estrechar los vínculos: “He notado un gran cambio en Maite, está más independiente, integrada y colabora en diferentes tareas en la casa. En lo personal, para mí ha sido una gran ayuda, porque trabajo y sé que ella está bien cuidada y aprendiendo cosas nuevas”, afirma.
En ese sentido, el secretario ejecutivo de Cuaresma de Fraternidad, Damián Cantón, agradece el apoyo recibido en todos estos años y llama a seguir colaborando.“Se invita a vivir Cuaresma desde aquellas privaciones que hacemos en beneficio del bien común, en este caso, de los niños y niñas del país, por el bien de su desarrollo en diversos aspectos”, enfatiza.
Durante 40 días, los católicos y demás personas de buena voluntad pueden aportar a través de las alcancías y sobres que se distribuyen en parroquias, capillas y colegios. Otra vía es la cuenta corriente número 187593 del BancoEstado a nombre de Cuaresma de Fraternidad.
A partir de este año, los fondos que se recauden apoyarán el trabajo de proyectos para niños y niñas entre 0 y 14 años de distintas zonas del país, con una cobertura superior a 3.300 menores.
Las iniciativas contemplan acciones que benefician la integración social y/o cultural, actividades que promuevan condiciones de participación y acceso a instancias para mejorar la lecto-escritura, todos destinados a niños con necesidades educativas especiales y actividades para el fortalecimiento de vínculos parentales.
Solange Toro (27) tiene una hija de tres años en el jardín infantil “Despertar”, de la Vicaría Zona Sur, y es un ejemplo del gran apoyo que este tipo de iniciativas presta para estrechar los vínculos: “He notado un gran cambio en Maite, está más independiente, integrada y colabora en diferentes tareas en la casa. En lo personal, para mí ha sido una gran ayuda, porque trabajo y sé que ella está bien cuidada y aprendiendo cosas nuevas”, afirma.
En ese sentido, el secretario ejecutivo de Cuaresma de Fraternidad, Damián Cantón, agradece el apoyo recibido en todos estos años y llama a seguir colaborando.“Se invita a vivir Cuaresma desde aquellas privaciones que hacemos en beneficio del bien común, en este caso, de los niños y niñas del país, por el bien de su desarrollo en diversos aspectos”, enfatiza.
Durante 40 días, los católicos y demás personas de buena voluntad pueden aportar a través de las alcancías y sobres que se distribuyen en parroquias, capillas y colegios. Otra vía es la cuenta corriente número 187593 del BancoEstado a nombre de Cuaresma de Fraternidad.
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